Nuevo varapalo de Moody’s a España. La agencia de calificación de riesgo ha advertido hoy de que nuestras comunidades autónomas españolas no podrán cumplir el objetivo de déficit del 1,3% .
La agencia ha publicado un informe en el que recoge los recortes realizados pero asegura que no serán suficientes para cumplir con los objetivos.
Según Moody’s, aunque se han conseguido frenar los gastos, los ingresos también se reducen.
Según el informe los últimos datos revelan que los gastos operativos se redujeron en el tercer trimestre en un 1,3% frente al crecimiento del 0,3% del anterior trimestre. Sin embargo también señala que los ingresos han caído un 3% en el tercer trimestre.
«Como resultado -dice Moody»s- mantenemos nuestra previsión de que las regiones probablemente excederán su objetivo de déficit en al menos un punto porcentual«.
La consecuencia de esta previsión: una calificación negativa de la deuda.
Moody’s contempla en su previsión el hecho «la mayor parte del gasto de las comunidades autónomas se produce en el último trimestre del año».
Según este razonamiento, aunque en los nueve primeros meses del año, la cifra que manejaban las Comunidades Autónomas se colocaba incluso por debajo del objetivo del 1,3%, a finales de año, ahora volvería a subir.
Como prueba, explica que el año pasado, el déficit en el tercer trimestre era del 1,2%, y en la última parte del año saltó hasta el 2,8%.
Cataluña, Castilla-La Mancha y Comunidad Valenciana
Moody»s asegura que hay regiones españolas que cuentan con un balance operativo casi equilibrado y llama la atención sobre las que más gastan: Cataluña, que cuenta con una calificación Baa2 negativa; Castilla-La Mancha, Ba2 con posible revisión a la baja; y la Comunidad Valenciana, Baa2 con perspectiva negativa. La nota de referencia y más alta es la triple A positiva.
El déficit operativo de Cataluña era de 2.100 millones de euros, el de Castilla-La Mancha de 1.200 millones, y el de la Comunidad Valenciana con 1.100 millones.
La agencia señala que en nuevo gobierno de Mariano Rajoy deberá hacer frente a este problema, ya que si éstas no alcanzan el objetivo de déficit, también “amenazan con aumentar las cifras nacionales para el próximo año».
Como recuerda en el informe, los objetivos de déficit tienen poco impacto en el corto plazo pero son indicadores «importantes para devolver la confianza a los mercados».