“No nos vale un partido a cien puntos. Hay que ser inteligentes. No podemos pensar en una anotación alta. Es el típico choque en el que la calidad individual del rival te quita presión y te anima a atreverte”. Así de contundente se ha mostrado el seleccionador español de baloncesto, Sergio Scariolo, en la previa de la gran final olímpica.
“No existe el partido perfecto. Ni Estados Unidos puede hacerlo. Tenemos que leer bien el choque, tomar buenas decisiones. Los dos últimos partidos nos han dado mucha confianza”, asegura el seleccionador.
Todo el plantel, incluido el entrenador, saben que se trata de un partido y una oportunidad especial. “Siento responsabilidad y motivación, porque finales olímpicas hay pocas”.
El partido tiene sabor a revancha, después de lo sucedido hace cuatro años en Pekín. “De Pekín a aquí los americanos han cambiado su juego en el tiro de tres puntos. Ahora entienden cómo se juega a nivel internacional. Ahora sacan a los pívots fuera del perímetro y esa es la gran diferencia». Todo queda abierto para esta tarde.