En un comunicado, el consistorio ha precisado que están tomando muestras biológicas de los animales muertos y también se está analizando el agua de riego de los jardines del parque.
De forma preventiva, el ayuntamiento ha aumentado el caudal del riego y ha ordenado una limpieza extraordinaria de algas y elementos vegetales, una medida que ya tomó en 2008 cuando se produjo un episodio similar.