Bajo el lema de »Apadrina la libertad de información», la campaña ha reunido a periodistas como Ana Blanco, Siscu Baigés, Rosa María Calaf, David Cantero, Carmen Gurruchaga, Monserrat Domínguez, Soledad Gallego-Díaz, Paloma Gómez Borrero, Fernando González Urbaneja, Rosa Montero, Pedro Piqueras, Hilario Pino, Nativel Preciado, Jon Sistiaga, José Antonio Sorolla, Rosa Massagué o Maruja Torres, entre otros.
La idea es que cada uno de ellos se ocupe de dar a conocer y denunciar la historia de otro periodista encarcelado. Según RsF, apadrinar a periodistas encarcelados en países donde no se respeta la libertad de información es prácticamente «un seguro de vida para ellos» y sirve para evitarles una segunda condena: la del silencio y el olvido.
Se trata de personas como el periodista chino Hada, cronista político de 55 años, de »The Voice of the Southen Mongolia», en prisión desde hace diecisiete años, acusado de separatismo y espionaje sólo por publicar información. O de su mujer Xinna y su hijo Uiles, también en prisión por contar la situación de su padre en los medios internacionales.
Lo mismo que Hada, el turco Nedim Sener (del diario »Milillet», en prisión desde hace 10 meses), el egipcio Maikel Nabil Sanad (primer bloguero encarcelado por un tribunal militar tras la caída de Mubarak), y el iraní Hossein Ronaghi Maleki (casi dos años en prisión, por criticar la censura) se han incorporado este año a la lista de diez periodistas que apadrina la sección española de Reporteros Sin Fronteras.
Hasta un total de 291 periodistas y blogueros están actualmente en la cárcel simplemente por ejercer su profesión. De la lista de apadrinados en España el pasado año, cuatro periodistas lograron la libertad: Hu Jia, de China; Pedro Argüelles Morán, de Cuba; Fahem Boukadous, de Túnez; y Zarganar, de Birmania.
Sin embargo, no todos han tenido tanta suerte. Otros como los periodistas eritreos Dawit Isaak (del semanario »Setit», encarcelado desde hace 10 años, sin juicio alguno, por reclamar la libertad de expresión) y Yirgalem Fisseha Mebrahtu (periodista de prensa y radio, encarcelada desde hace dos años sin acusación) no han conseguido aún su libertad.
Lo mismo que la ruandesa Agnès Uwimana Nkusi (directora de la revista »Umurabyo», en prisión desde hace año y medio), el chino Shi Tao (periodista del »Dangdai Shang Bao» encarcelado hace siete años, acusado de divulgar secretos de estado); el birmano Nay Phone Latt (bloguero, tres años en prisión por usar internet); y Annakurban Amanklychev, periodista de Turkmenistán (encarcelado desde hace cinco años, acusado de traicionar a la patria por grabar un documental sobre su país para una productora francesa).
Reporteros Sin fronteras lanza este año, el día 12 de diciembre, la campaña »Apadrina la libertad de información», y dedica esta jornada a recordar a los periodistas encarcelados en el mundo. En su página web (www.rsf-es.org) se puede encontrar la lista de periodistas encarcelados y su trayectoria, los padrinos y madrinas; y los vídeos de algunos conocidos profesionales confesando por qué han apadrinado a un periodista en tan penosa situación, y por qué consideran importante sumarse a esta campaña.