El esperado inicio de la media veda «no ha defraudado» en capturas a los cazadores desplegados en la provincia burgalesa, sobre todo en las zonas más al norte, tal y como ha explicado a Europa Press el presidente de la Federación Regional de Caza, Santiago Iturmendi, quien ha asegurado que en algunos casos se ha llegado a cubrir en una sola mañana el cupo de codornices, cifrado en la treintena, «algo que no ocurría ni siquiera allí desde hace años».
Y es que Burgos, como así ha advertido Iturmendi, se caracteriza por ser la provincia de España con más capturas de codornices, que ya esta primera mañana, entre las 10.30 y las 11.00 horas, se situaba en una media de más de quince. «Ha habido perchas superiores a esa cifra», ha abundado el responsable regional de los cazadores, quien ha precisado que en algunas zonas de esta provincia se han alcanzado cifras inferiores debido a la retirada masiva de paja en determinadas tierras.
En León la jornada se ha dado mejor que otros años, en Palencia ha sido similar y en Soria no se han cumplido las expectativas, fundamentalmente por el efecto de la luna llena, algo que ha afectado en parte también a la provincia palentina y muy al norte de la burgalesa, «ya que ha motivado que las codornices se movieran a otras zonas en busca de humedad y mayor cobertura».
La peor parte, como ya se presumía, la han sufrido los cazadores de provincias como Valladolid, Segovia, Ávila, Salamanca y Zamora, pues, como así ha lamentado Iturmendi, se ha dado el caso de cuadrillas que no han visto una codorniz como consecuencia de la sequedad del terreno y de que muchos agricultores han pasado el cultivador a las fincas, «lo que ha hecho que desapareciera cualquier vegetación, y así es imposible que halla piezas», ha lamentado.
En este sentido, el responsable de la Delegación de Caza en Valladolid, Jesús Hernández, ha calificado de «mala» la jornada y ha explicado que sólo en algunos municipios con tierras de regadío, sobre todo en la zona de Pinares, fundamentalmente Montemayor y Camporredondo, entre Tudela y Medina del Campo, se han obtenido perchas de hasta cinco piezas, mientras que en otras de la provincia no se ha llegado ni a dos.
«En Valladolid, en la zona centro-sur, la situación no va a mejorar nunca porque el cereal se recoge muy pronto, se trilla la paja y se aran las tierras, y así iremos de mal en peor hasta llegar a una situación en la que recordaremos la codorniz como una especie que se llegó a cazar y que va a desaparecer», ha lamentado Hernández.