El Departamento vasco de Salud ha advertido de que uno de cada diez melanomas (cáncer de piel) diagnosticados en la Comunidad Autónoma Vasca en el año 2009 correspondieron a personas menores de 30 años. De esta forma, constata que el problema «no es exclusivo» de las personas de más edad.
En un comunicado, el Departamento ha recordado que, si bien la supervivencia a los tumores de piel ha mejorado en los últimos años gracias a la concienciación y al diagnóstico precoz, resulta «vital» reiterar la importancia de protegerse adecuadamente del sol y vigilar también la evolución de lunares y manchas cutáneas.
Actualmente, se diagnostican unos 160.000 casos de cáncer de piel al año en todo el mundo, lo que representa el 1,5 por ciento de los tumores en ambos sexos, y ocho de cada diez se localizan en países desarrollados, siendo en Europa más frecuente entre las mujeres.
En Euskadi, que cuenta con su propio Registro de Cáncer, las tasas de incidencia y mortalidad del melanoma cutáneo siguen, desde 1986, un patrón ascendente en ambos sexos, por lo que el Departamento de Salud ha recordado, en puertas del verano, que protegerse del sol y vigilar las manchas de la piel resulta «vital».
Respecto a las tasas de mortalidad globales, en el caso de los hombres, han aumentado significativamente, mientras que no se han registrado cambios sustanciales en las mujeres. No obstante, la supervivencia al melanoma ha aumentado en ambos sexos, con un incremento mayor en los hombres que en las mujeres, aunque la supervivencia en términos absolutos en estas últimas es mayor.
RECOMENDACIONES
En este contexto, el Departamento recomienda evitar la exposición al sol durante las horas centrales del día (entre las 12.00 y las 16.00 horas), cuando la luz ultravioleta es más intensa, y utilizar barreras físicas para que el sol no llegue a la piel, tales como sombrillas, sombreros de ala ancha, camisetas, etc. Por lo general, las telas apretadas y de colores oscuros ofrecen mayor protección.
Igualmente, recuerda la necesidad de aplicar sobre la piel fotoprotectores solares con filtros de protección UVA y UVB adecuados a su fototipo (tipo de piel).
Para el Departamento de Salud, la progresiva toma de conciencia por parte de la población respecto a la relevancia de protegerse frente al sol y de vigilar las manchas en la piel se ha traducido en un aumento de diagnósticos en fases iniciales y una mejora sustancial en la supervivencia.
En este sentido, recuerda que los tumores pequeños son fácilmente tratables y curables, mientras que un melanoma en fase avanzada puede ser mortal. En cualquier caso, el Departamento subraya también la conveniencia de consultar al dermatólogo cuando se observen cambios en un lunar, sin olvidar en cualquier caso que la mayoría de los lunares suelen ser benignos.