Montero, quien ha visitado las nuevas instalaciones destinadas a la atención de las enfermedades mentales del Hospital de Valme de Sevilla, se ha referido a la necesidad de que estas personas dispongan de una instalaciones «que favorezcan su autonomía al mayor grado posible», ya que, según ha dicho, «lo que se persigue en su mayor integración en el entorno familiar y en el laboral», éste último «la asignatura pendiente más importante que tenemos con este grupo de pacientes».
En cuanto a los dispositivos de salud mental infanto-juvenil, Montero ha reconocido a Europa Press que éste es un grupo «que preocupa en especial a los profesionales sanitarios, ya que de nuestra capacidad de abordar de forma adecuada sus patologías, dependen mucho su perspectiva de futuro».
«Todo ello hace que nos volquemos en estos grupos de edad», ha explicado Montero, quien ha aprovechado para resaltar el trabajo que los profesionales del área de Valme tienen en este ámbito, «ya que siempre ha mostrado una especial iniciativa en abordar estos problemas». De hecho, ha explicado que, «a veces, detrás de la patología mental hay estructuras familiares que necesitan también del consejo terapéutico».
Sea como fuere, la titular de Salud ha destacado que en estas dos últimas legislaturas en el conjunto de la comunidad «se han conseguido objetivos fundamentales en la atención de la salud mental, como el incremento de las camas de hospitalización de agudos, con más de un 10 por ciento en toda la comunidad; o triplicado las plazas de hospital de día, que es un recurso fundamental para la conciliación familiar, y duplicado también las plazas de comunidad terapéutica en toda Andalucía».
«Éste es un esfuerzo que ha merecido la pena y en un área que necesitábamos intensificar, incluso en momentos de crisis respecto a las actuaciones que se había llevado a cabo previamente», ha concluido.