En nota de prensa, la política ha explicado que las investigaciones comenzaron después de que el perjudicado denunciara la desaparición de su teléfono móvil, un terminal de alta gama valorado en 650 euros que había dejado olvidado por error en el mostrador de caja de una tienda ubicada en un centro comercial de la ciudad.
Las pesquisas realizadas por los agentes permitieron averiguar que la autora de la sustracción se trataba de la clienta que se encontraba detrás del denunciante en la cola y que, una vez identificada, fue detenida por un presunto delito de apropiación indebida, reconociendo los hechos en dependencias policiales, haciendo entrega así mismo del teléfono denunciado.