El director del hotel denunció que el 4 de febrero de 2015 los condenados F.J.A.G. y J.M.F.P. le insultaron y le amenazaron en las instalaciones del Juzgado de lo Social donde se había estado celebrando un juicio por un despido de una de las empleadas del hotel. En la denuncia afirmó que le llamaron «hijo de puta y gallego de mierda».
El juez, en virtud de las pruebas practicadas, ha estimado que «la conducta de los denunciados es incardinable en la Falta de injurias y por ende la procedencia de dictar frente a los mismos una sentencia condenatoria, estimándose desvirtuada la presunción de inocencia de éstos».