El primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, ofreció hoy una recompensa de un millón de euros por pistas que lleven al asesino del periodista Jan Kuciak y su novia, Martina Kusnirova, hallados muertos el lunes en su domicilio cerca de Bratislava.
«Si se demuestra que el doble asesinato tiene que ver con el trabajo de periodista, sería un atentado contra la democracia», dijo Fico durante un encuentro con la prensa.
La muerte de Kuciak ha causado conmoción dentro y fuera del país centroeuropeo, con mensajes de denuncia de organizaciones como el Parlamento Europeo, la OSCE, Reporteros sin Fronteras, la Federación Europea de Periodistas (FEP) y la Federación Internacional de Periodistas (FIP), entre otros.
«Estoy conmocionado y destrozado por el hecho de que en Eslovaquia pueda ocurrir esto. El asesinato a sangre fría de jóvenes es un acto miserable. Hay que encontrar cuanto antes a los que lo hicieron y proporcionar seguridad a los periodistas», declaró el presidente eslovaco, Andrej Kiska, en su página web.
Jan Kuciak, de 27 años, era conocido por sus investigaciones sobre corrupción para el portal de noticias «Aktuality.sk».
Su último artículo versó sobre el hombre de negocios Marian Kocner y sus supuestos fraudes fiscales.
También investigó traspasos de propiedad poco transparentes en la urbanización «Five Stars Residence» de Bratislava, donde está presuntamente implicado el empresario Ladislav Basternak, sospechoso de fraude fiscal y actualmente investigado.
Fico declaró hoy que la defensa de los periodistas es una «prioridad» de su Gobierno y ofreció la recompensa «al que dé información relevante que lleve a detener al autor».
Junto al jefe de Gobierno eslovaco había una mesa con un millón de euros en efectivo.
El ministro de Interior, Robert Kalinak, solicitó al redactor jefe del portal «Aktuality.sk», Peter Bárdy, que se sume al equipo que instruye el caso en aras de «la máxima transparencia en la investigación».
El jefe de la Policía eslovaca, Tibor Gaspar, no descartó hoy una posible implicación de la mafia italiana, ya que Kuciak investigaba el manejo oscuro de fondos europeos en proyectos realizados por empresarios italianos en el este de Eslovaquia.
Mientras, los partidos conservadores opositores OLaNO y SaS exigieron la dimisión del ministro de Interior y del jefe de la Policía por su supuesta pasividad a la hora de proteger a Kuciak, quien había denunciado que lo estaban amenazando.