“Tengo 20 años, vivo con y de mis padres. No me da para un hotel cada vez que quiero follar. Además, todavía hace frío para hacerlo en la calle. Si tuviese coche sería mejor, pero como no, un Car2go o un Emov viene bien”. Así de rotundo justifica David (nombre ficticio) practicar sexo los fines de semana en un Car2go o Emov.
Desde finales de 2015, Madrid cuenta con una flota de coches eléctricos de alquiler para trayectos dentro de la ciudad a través de una App en el móvil. Su presencia ha proliferado hasta superar el millar de vehículos en la capital. El mismo éxito ha conseguido Emov, que desembarcó en Madrid en diciembre de 2016 con 500 coches y las mismas condiciones que su competidor.
David relata a Teinteresa.es que “lo de follar en un car2go o un emov es algo muy normal entre los jóvenes de Madrid. Es muy barato y siempre hay alguno cerca”. El minuto en un Car2go sale a 21 céntimos, mientras que en un Emov a 19 céntimos. La media hora le cuesta a tu bolsillo alrededor de seis euros.
“Prefiero los emov para estas cosas porque son más amplios, vuelvo los respaldos de los asientos delanteros y nos acomodamos en la parte de atrás. A ver, no es el mejor lugar, ni el más cómodo, pero sales de la discoteca La Flaca a las 4:00 a.m. con tu ligue o tu novio y, ¿qué haces?”
La media de duración de los viajes que realizan los usuarios de Car2go y Emov es de 20 a 25 minutos dentro de los 53 kilómetros de área de acción en la que operan, siempre dentro de la M-30. Pueden aparcar en las zonas del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER), tanto azul como verde, sin ningún tipo de coste, y el pago se realiza a través de la app.
El Viso: apartado y poco concurrido
El sitio preferido de David para mantener relaciones sexuales dentro de un coche de alquiler es El Viso, un barrio ubicado en el distrito de Chamartín compuesta por casas unifamiliares de dos pisos, donde en los años 40 vivían intelectuales, y ahora, además de ser una de las zonas más cotizadas de la capital, es un lugar poco concurrido.
La limpieza de los car2go y de los emov corre a cargo de las respectivas empresas y está incluida en el precio del alquiler. “Cuando lo uso, intentamos no manchar. Y si manchamos un poco, lo limpiamos. Solemos poner una cazadora en el asiento o algo parecido”.
“No hay vigilancia, por ahí no pasa la Policía. Yo no soy el único que va. Ten en cuenta que por esas calles no pasa un alma por las noches. Además, intentamos no dar el cante, no gritar mucho y tener las ventanillas subidas”.
¿Es legal practicar sexo en el coche?
La Policía Municipal no tiene constancia de estos hechos: “No hemos recibido ninguna denuncia sobre que se practique sexo en los coches de alquiler eléctricos”.
Y es que, en realidad, no existe una ley que regule la imposición de multas por la práctica de sexo en el coche. Sin embargo, este asunto está sujeto a las circunstancias en las que se dé. Por ejemplo, si la pareja está manteniendo relaciones en las cercanías de un parque infantil pueden ser multados por exhibicionismo. También si una pareja es sorprendida teniendo sexo oral en el coche, el conductor puede ser multado por conducción temeraria.
Por lo tanto, el único artículo del Código Penal que prohíbe comportamientos sexuales públicos es el delito de exhibicionismo y provocación sexual. Solo se sanciona si la actuación ocurre ante menores o personas incapacitadas, y además debe tratarse de una exhibición obscena, es decir, mostrar los genitales.