En el proyecto participaron 216 pacientes, y de forma aleatoria 108 pasaron al grupo de intervención donde recibieron el tratamiento multicomponente que consistía en 5 sesiones de psicoeducación y 4 sesiones de relajación.
En las sesiones educativas se hablaba de los síntomas típicos de la fibromialgia, de las condiciones médicas de la comorbilidad, de la influencia de los factores psicosociales en el dolor, los tratamientos farmacológicos y no farmacológicos y los beneficios de hacer ejercicio de forma regular.
Y por otra parte, las sesiones de relajación en las que había un psicólogo clínico iban dirigidas a aumentar el control del dolor de los pacientes a través de ejercicios de auto-relajación física y mental.
Según los investigadores del estudio, los resultados muestran una mejora específica de los pacientes que participaron en el grupo de intervención en la función física, en el sentir mejor, en el dolor y cansancio, y el ansiedad y la depresión.