Según el último balance, en total murieron 208 personas que se resistieron al golpe, entre ellos tres soldados, 60 policías y 145 civiles, mientras que 1.491 personas resultaron heridas.
Además, fallecieron 24 soldados golpistas y 50 resultaron heridos, precisó el primer ministro, quien volvió a responsabilizar del golpe al predicador Fethullah Gülen.
Según Yildirim, en los ministerios hay funcionarios que se unieron a la conspiración golpista.
«Hemos empezado a limpiar» el sistema, ha dicho el primer ministro y precisó que han sido suspendidos ya más de 10.000 funcionarios de diferentes ministerios.
Solo del ministerio del Interior han sido expulsados 8.777 empleados, sobre todo policías y gendarmes, mientras que de los demás ministerios fueron suspendidos unos 1.500 funcionarios.
«Estos números van a cambiar (subir)», ha asegurado el primer ministro ante la prensa y en presencia de su gabinete.
Volver a la pena de muerte
En cuanto al creciente debate sobre la pena de muerte, Yildirim matiza un poco las declaraciones hechas en las pasadas 48 horas y reconoce que si bien el Gobierno debe tener en cuenta las demandas del pueblo siempre debe decidir con cautela.
«El Parlamento debe debatir este asunto. No podemos decir ni si ni no por adelantado», ha señalado el primer ministro.
Sobre la exigida extradición de Fethullah Gülen de Estados Unidos a Turquía, Yildirim ha anunciado que el ministerio de Justicia enviará toda la documentación necesaria a Washington.
Destaca la amistad estratégica y la profunda relación entre ambos países, aunque ha dejado entrever su malestar por la insistencia de Estados Unidos de recibir más pruebas sobre Gülen.
«Si el líder que ordenó todo esto está claro y todavía tus amigos te piden evidencias, entonces podría cuestionar nuestra amistad», ha advertido el primer ministro.
Una lista de jueces para depurar
El comisario europeo de Política de Vecindad y Ampliación, Johannes Hahn, ha afirmado este lunes que las autoridades turcas tenían preparada una lista de jueces a los que depurar como represalia tras el intento de golpe de Estado en la noche del pasado viernes al sábado.
«Estoy muy preocupado. Es exactamente lo que nos temíamos«, ha indicado Hahn a su llegada al Consejo de Ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE), en el que se abordará la situación en Turquía.
El comisario austríaco ha recordado que, tras el levantamiento de un sector de los militares turcos, la UE pidió que las consecuencias estuvieran «en línea con los estándares internacionales del Estado de derecho». «Y lo que vemos no se cumple realmente«, apuntó.
Preguntado por si las autoridades turcas están sacando ventaja de la situación, Han respondió: «Al menos, algo ha sido preparado«. «Las listas, que ya estaban disponibles justo después de este acontecimiento, indican que algo estaba preparado, que en cierto momento tendrían que ser utilizadas», consideró.