A su salida de un encuentro en Madrid con la ministra de Política Territorial, Meritxell Batet, el dirigente valenciano ha reiterado que la detención del presidente de la Diputación se produjo en el marco de un caso de prevaricación administrativa, en relación con unos nombramientos, por lo que no considera preceptivo pedir su dimisión como primer edil.
«Todos ansiamos que se levante el secreto de sumario, si hubiera alguna razón en términos políticos que pareciera falta de cualquier ética se tomarían otras decisiones», ha defendido Ximo Puig, quien ha separado el caso de Rodríguez en la Diputación del ayuntamiento de Ontinyent.
Hace un mes Rodríguez fue detenido en el margen de la operación Alquería por unas supuestas irregularidades en la contratación de un puesto público y se encuentra imputado por un los presuntos delitos de prevaricación y malversación de caudales públicos. El PSPV procedió la misma jornada de su detención a retirarle de la Diputación de Valencia aunque Rodríguez mantuvo su puesto como alcalde, delegando sus funciones en otra concejala hasta esta semana.