El partido quiere que sea el exdirigente el que lo haga, como ha hecho ya con su baja del partido y su renuncia a ir en las listas europeas. Pero fuentes populares señalan a Europa Press que mañana a las 14 horas, cuando se cierre el Registro de la Cámara regional, se habrán cumplido 48 horas, un tiempo «prudencial» desde que Garrido anunciase su decisión. Será a partir de ahí cuando decidan si toman la decisión de expulsarlo.
Si renuncia o si finalmente el PP decide echarlo, el ahora candidato por Ciudadanos pasaría a ocupar un puesto como diputado no adscrito y dejaría de ser miembro de la Diputación Permanente.
El PP de Madrid, con su presidente Pío García-Escudero a la cabeza, dejo este mismo miércoles patente no sólo su desconcierto sino también su malestar con la «sorprendente» salida de Garrido y cargó duramente tanto contra él como contra Ciudadanos en un acto electoral en Boadilla del Monte.