En rueda de prensa este martes, ha avisado de que «no es ninguna concesión» y que se trata de cumplir la ley penitenciaria, y ha insistido en que deben ser liberados inmediatamente.
Ha asegurado que es un «ejercicio de legalidad española» y que no se debe interpretar como un gesto de distensión del Gobierno porque, a su juicio, son presos políticos que no han cometido ningún delito.