La mandataria de Chile, Michelle Bachelet, quien el próximo 11 de marzo transferirá el poder al presidente electo Sebastián Piñera, expresó hoy su confianza en que la política internacional desarrollada durante su mandato «seguirá siendo una tónica predominante», dados sus «buenos resultados».
«La política internacional de mi Gobierno ha estado dirigida a impulsar el entendimiento entre los pueblos, la democracia, los derechos humanos, a favorecer la paz, fortalecer las relaciones económicas y trabajar en cooperación entre los diferentes ámbitos», dijo al abrir el seminario «Perspectivas de comercio e inversiones: Chile-Cuba», en el segundo día de su visita oficial a la isla.
En el acto, en el hotel Nacional de La Habana, la gobernante manifestó su confianza en que «esa línea, que tan buenos resultados ha tenido en, por ejemplo, la creciente presencia de Chile en América Central y el Caribe, y por cierto en Cuba, seguirá siendo una tónica predominante».
«El gran proyecto colectivo de la integración regional, colaborar entre todos para buscar oportunidades en nuestro territorio y en el resto del mundo, es un objetivo que interpretan todos en nuestra comunidad. Sigamos por esa senda (…)», agregó.
El 4 de enero, el presidente electo Piñera se reunió con el canciller chileno, Heraldo Muñoz, para «cubrir todos los temas de la política exterior» de interés para el país, de cara al cambio de Gobierno.
La visita de Bachelet a Cuba ha generado críticas y recelos en sectores políticos oficialistas y opositores chilenos y es de las últimas giras exteriores de la jefa de Estado, junto a la que realizará a Japón.
En víspera del viaje, un grupo de senadores y diputados de derecha, centro e izquierda -entre ellos, el excandidato presidencial oficialista Alejandro Guillier- presentaron sendos proyectos de resolución en los cuales pidieron a la mandataria que rechazara «la violación a los derechos humanos» en la isla.
En la agenda oficial de la visita de dos días a Cuba, que concluye hoy, no figura ningún encuentro con representantes de la disidencia interna del país caribeño.
Además de inaugurar el seminario de negocios, Bachelet visitará hoy una escuela que lleva el nombre del que fuera presidente chileno Salvador Allende (1970-1973), donde se firmará un convenio de colaboración bilateral en el sector de la salud.
Ya por la tarde está previsto que se reúna en el Palacio de la Revolución, sede del Gobierno, con su homólogo cubano, Raúl Castro, quien también está en la recta final de su mandato, que concluirá en abril próximo, cuando el Parlamento cubano elija a un nuevo presidente.
La última vez que Bachelet viajó a Cuba fue en junio de 2016, cuando asistió en La Habana a la firma del histórico alto el fuego bilateral y definitivo entre el Gobierno de Colombia y la guerrilla de las FARC, alcanzado tras años de conversaciones de paz en la capital cubana.