En cambio, la competitividad de España, medida según el índice de precios al consumo, frente a la UE-17 perdió un 0,1%, menos que la pérdida del 0,5% del año anterior, por lo que Economía destaca que se produce una mejora respecto a 2011.
El ITC calculado frente a los países de la UE-27 que no pertenecen a la zona euro mejoró un 4%, por la caída del 0,5% en el índice de precios relativos y, sobre todo, por el descenso del tipo de cambio del 3,5%.
Frente a los países de la OCDE, la competitividad-precio de España en 2012 mejoró un 1,4%, gracias al descenso del índice del tipo de cambio del 1,3% y al mantenimiento del índice de precios relativos en 2012.
Por su parte, comparada la competitividad de la economía española con los países de la OCDE que no pertenecen a la zona euro mejoró un 4,8%, mientras que se anotó una ganancia del 5,1% frente a los estados de la OCDE que no están en la UE-27.