Harvey Kenyon-Cairns, un bebé de apenas tres meses, fue convocado a la embajada estadounidense en Londres para una entrevista después de que su abuelo lo identificara erróneamente como un terrorista en la solicitud del visado, según informa The Guardian.
El pequeño debía volar a Orlando en Florida para sus primeras vacaciones en el extranjero, aunque el error de su abuelo Paul Kenyon, acabó por truncar el viaje. «¿Quieres participar o has participado alguna vez en actividades terroristas, espionaje, sabotaje o genocidio?» Kenyon marcó »sí» en lugar de »no».
Sólo se enteró de su error cuando se le negó el viaje de su nieto. «No podía creer que no pudieran ver que era un error y que un bebé de tres meses no podía hacer daño nadie«, dijo el hombre de 62 años.
El bebé fue llevado hasta la embajada en Grosvenor Square, Londres, para ser interrogado por los funcionarios. «Harvey fue bueno durante la entrevista y no lloró ni una vez. Me planteé llevarlo vestido con un traje de color naranja (indumentaria de la cárcel), pero me lo pensé mejor «, dijo Kenyon. «No parece que tengan un gran sentido del humor y quizá no vieran el lado divertido”, bromea el abuelo.
«Es obvio que (el bebé) nunca estuvo involucrado en un genocidio, ni en espionajes, pero ha saboteado bastantes pañales, aunque tampoco dije eso en la embajada de Estados Unidos», comenta jocoso Kenyon.
Harvey y sus padres tuvieron que volar unos días más tarde y el error le costó £3.000, ya que la nueva visa no llegó a tiempo para los vuelos de la familia. «La equivocación salió muy cara, sinceramente esperaba que la embajada estadounidense se diera cuenta de que era un simple error», explicó Kenyon.
«De todos modos, si fueras un terrorista, sospecho que no marcarías ‘sí’ en el formulario «, concluye con ironía.