«Quiero decirle al país que, pese al informe de la CIJ, que ha sido injusto, la lucha del pueblo boliviano sigue. Lo importante en este momento es que, aún siendo un resultado que no hace Justicia, hay una corte internacional que reconoce que existe un tema pendiente con Chile», ha escrito en su cuenta oficial de Twitter.
El líder indígena ya insistió el lunes, tras escuchar el veredicto de la CIJ, que «si bien no hay una obligación de negociar hay una invocación a seguir con el diálogo». «Bolivia nunca va a renunciar», dijo en declaraciones a la prensa desde La Haya.
Morales acudió a la CIJ en 2013 con la intención de que declarara que la promesa que han hecho los sucesivos gobiernos chilenos a lo largo de los años de explorar una solución para que Bolivia recupere la salida marítima que perdió en la Guerra del Pacífico obliga a Chile a negociar.
La CIJ finalmente ha dictaminado, por doce votos frente a tres, que Chile no tiene «obligación legal» de negociar un acceso soberano al Pacífico para Bolivia. Al mismo tiempo ha aclarado que eso no significa que los dos países puedan seguir dialogando «en un espíritu de buena vecindad» para acordar una solución.
A este respecto, el presidente chileno, Sebastián Piñera, que ha calificado de «triunfo» la sentencia de la CIJ, se ha mostrado dispuesto a entablar conversaciones con Bolivia, sin que ello comprometa en ingún caso «el territorio y la soberanía» de Chile.