«La República Islámica de Irán hará todo lo que pueda para apoyar al oprimido pueblo palestino», ha enfatizado Rahimi, según ha recogido la agencia de noticias iraní IRNA. Por ello, ha exhortado al pueblo palestino a no desistir en su intento de lograr la independencia.
Rahimi ha recordado que la cuestión palestina es una «línea roja» para Irán y que defenderá a los palestinos al igual que a todos los pueblos oprimidos, puesto que es un «principio innegable» para Irán.
Asimismo, el »número dos» del Ejecutivo iraní ha remarcado el compromiso con la consolidación de los derechos fundamentales de los palestinos, en consonancia con anteriores pronunciamientos realizados por el líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jomenei.
Rahimi ha comparado la situación actual en Franja de Gaza con la «guerra desigual impuesta» por Irak a Irán entre 1980 y 1988, en la cual Irak «contó con el apoyo de las potencias mundiales», según informa la cadena iraní HispanTV.
Precisamente, Haniye ha acudido a Teherán para secundar la marcha que conmemora el 33 aniversario de la victoria de la Revolución Islámica de Irán el 11 de febrero de 1979 que supuso la instauración de un régimen islamista.
Israel mantiene un bloqueo territorial y económico al Gobierno gazací de Hamás desde que en 2007 venció en las elecciones legislativas, lo que ha agravado la situación económica en la Franja de Gaza. Además, Hamás y la facción palestina rival, Al Fatá, encabezada por el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, se enzarzaron en un conflicto interno que, tras varios intentos, se suavizó tras firmar un acuerdo de reconciliación en mayo bajo el auspicio de Egipto.
No obstante, las infructuosas negociaciones mantenidas entre ambas formaciones condujeron a varios meses de divergencias que hasta la semana pasada no han sido superadas mediante la firma de un nuevo acuerdo de reconciliación, esta vez amparado por Jordania, en el que se comprometen a convocar elecciones generales en los Territorios Ocupados Palestinos (Cisjordania y la Franja de Gaza) en el próximo mes de mayo, tal y como se especificó en el primer acuerdo suscrito el año pasado.
Este encuentro se produce en un contexto de tensión entre Israel e Irán. Tel Aviv ha manifestado su intención de atacar al régimen de Mahmud Ahmadineyad en caso de que su programa nuclear concluya con la fabricación de una bomba atómica, considerada una amenaza para Israel.