La delegación rusa estará compuesta previsiblemente por los viceministros de Exteriores Gennadi Gatilov y Mijail Bogdanov, informa RIA Novosti, que no menciona a posibles asistentes del lado estadounidense. La ONU ya ha aclarado que el enviado de esta organización y de la Liga Árabe para el conflicto, Lajdar Brahimi, no participará.
Washington y Moscú pactaron en mayo la celebración de una cumbre de paz en Ginebra para negociar una salida política a la guerra en que vive inmersa Siria desde hace más de dos años. Naciones Unidas calcula que más de 100.000 personas han muerto desde el inicio del conflicto, que no sólo no cesa sino que amenaza con recrudecerse.
Los rebeldes sirios acusan a las fuerzas del régimen de causar cientos de muertos durante una serie de bombardeos a las afueras de Damasco en los que se habría utilizado armamento químico. El Gobierno de Bashar al Assad ha negado estas acusaciones, puestas en duda también por Rusia, que ha hablado de «provocación» al referirse a un posible plan de la oposición armada para forzar la intervención de la comunidad internacional.