Las celebrities no dejan de sorprendernos con sus cambios de imagen por culpa de los retoques. Si hace unos meses era Renée Zellweger la que se presentaba en una fiesta con un rostro practicamente irreconocible, ahora ha sido Lidsay Lohan la que nos ha dejado sin palabras.
La que fuera niña Disney ha acudido a dos fiestas en una noche (a los Premios Elle y a una gala benéfica) y ha dejado ver su nuevo aspecto en el que parece que el bótox ha sido fundamental.
Además de tener la piel muy estirada y casi no poder ni sonreír debido a la tirantez bajo los ojos y en las mejillas, Lindsay también ha querido que sus labios fueran más gruesos y parece que se le ha ido la mano con las infiltraciones.
A pesar de que algunas famosas tratan de aparecer naturales en revistas y dejan que el paso del tiempo siga su curso, como Cindy Crawford y sus fotos sin photoshop a los 48 años, otras intentan permanecer jóvenes para siempre. Algo que, como todos sabemos, es imposible.