Los inicios en el mundo de la moda no son nada fáciles y para Kate Moss tampoco ha sido un camino de rosas.
Y es que la modelo que ahora tiene 38 años y una posición estable en la industria textil era una pobre adolescente cuando daba sus primeros pasos en este mundo y fue obligada a mostrar determinadas partes de su cuerpo para poder ser contratada por alguna campaña publicitaria.
Así lo ha contado a la revista »Vanity Fair», publicación que ha sido testigo de algunos de los testimonios más reveladores de la modelo que ahora, tras largos años de silencio, se ha decidido a hablar sobre algunos de los episodios más oscuros de su vida.
«Cuando tenía 16 años tuve que enseñar mis pechos. Ellos dijeron que si no lo hacía no volvería a trabajar para ellos. Así que me encerré en el baño y tras llorar volví a salir para hacerlo», confesaba la top model haciendo referencia a unas fotografías para The Face en las que se puede apreciar a una jovencísima Kate Moss aparentemente desnuda cubriéndose con un sombrero de paja.
Como ven, inicios nada fáciles para una de las mujeres con mayor trayectoria en esta industria, algo que desgraciadamente, se repite constantemente con un gran número de adolescentes que con lo único que sueñan es con convertirse en grandes estrellas de la pasarela.