Acabaron entre abrazos, Piqué olvidó manitas y salió de risas con cr7, Puyol fue un señor evitando polémicas, no hubo grandes polémicas, el partido fue tranquilo y eléctrico, pero la polémica persigue a los Madrid-Barcelona. Ahora le ha tocado el turno a Messi, que tras hacer uno de los peores clásicos que se le recuerdan (aunque un partido regular de Messi le de para dar una asistencia de gol), ha recibido innumerables críticas por su comportamiento. Que insultó a Arbeloa, menospreció a Karanka y lo último ¿Escupió al banquillo del Madrid? Cuatro aporta un vídeo que deja dudas pero que siembre la polémica. Tras el pelotazo al público del Bernabéu, la imagen de niño bueno del crack azulgrana se va desvaneciendo. unos hablan de campaña otros de que no hay ni buenos, buenos ni malos malos.
La bola no para. José Callejón, futbolista del Real Madrid, ha confirmado que Lionel Messi llamó «muñeco» de Mourinho al segundo entrenador del conjunto blanco, Aitor Karanka. Si faltaba un testigo ya lo hay. Callejón criticó la actuación del futbolista del club azulgrana, que, según informó, también esperó a Álvaro Arbeloa en el aparcamiento del Bernabéu para increparle.
«Lo de muñeco de Mourinho sí se lo dijo. Lo vi porque venía detrás de él (de Karanka). A lo mejor es normal que en un terreno de juego haya un momento de calentura y todos insultamos y decimos a veces cosas de las que después nos arrepentimos. Pero que un compañero de profesión espere una hora, hora y media después de terminar el partido, para increpar a un compañero nuestro con su mujer delante, pues esa situación sobra un poco. A veces ni los buenos son tan buenos ni los malos son tan malos», dijo.
«Hay situaciones en las que hay cosas que sobran. En un terreno de juego, con lo caliente que estás, se pueden decir cosas y se quedan ahí dentro. La situación de Messi con Arbeloa es un tema que no se puede comentar mucho porque sobra», insistió. Aunque parezca extraño, pues no es su imagen, Messi también acabó cabreado con Xabi Alonso, que hasta se permitió darle un cariñoso cachete a Messi tras una de sus entradas. El argentino pudo añadir a la calentura normal de un partido estas acciones y su mal encuentro y perdió los papeles.
Los jugadores del Barcelona se quejan de que Arbeloa da con y sin balón, que las imágenes solo muestran una pequeña parte de las faltas, que a veces se producen sin que el balón esté en juego. Y eso no lo perdonan.
Cuestionado por si la actuación del argentino era equiparable a la de José Mourinho, que al finalizar un partido en el Camp Nou esperó en el aparcamiento al árbitro del encuentro, negó que fuera una situación similar porque del técnico portugués «sólo se vieron unas fotos en las que estaba esperando cerca del autobús». «No vi que dijera nada», apuntó.