El Tribunal constitucional ha respaldado la condena a Jordi Cuixart, líder de Òmnium Cultural, de 9 años de prisión por sedición. Así, se ha desestimado el recurso de amparo contra la sentencia del Alto Tribunal.
Rechazando la propuesta de del magistrado Cándido Conde-Pumpido de estimar los recursos, la condena por asedio a Parlament sigue vigente con el apoyo mayoritario del Tribunal. Los magistrados Juan Antonio Xiol y María Luisa Balaguer han votado en contra.
La Audiencia Nacional ya había absuelto a los acusados alegando que lo ocurrido formaba parte del derecho de reunión, pero el Tribunal Supremo revocó la sentencia. Ahora, la sentencia desestimatoria de los recursos estará a cargo de un nuevo ponente designado por el Tribunal.
«La gravedad de los hechos enjuiciados en la instancia no se cuestiona en ningún momento. Pero hubiera sido necesario tener en cuenta las dudas técnicas que el recurso al tipo penal de sedición suscita en este caso», destacaron en su momento sobre Turull y Rull los mismos magistrados que ahora han emitido voto particular y que previsiblemente será la misma posición que defiendan con Cuixart.
En esta ocasión, el ponente Juan José González Rivas considera que su condena «no obedece a una finalidad espuria de persecución o castigo por su posición política o ideológica», y que sus acciones no se englobaron dentro de su derecho de libertad de expresión.
Sobre Jordi Sánchez, Santiago Martínez-Vares, ha explicado que sobrepasó «los límites de lo que puede considerarse un ejercicio legítimo de aquellos derechos», concluye.