La evolución hasta abril muestra que el déficit del Estado continúa la senda descendente iniciada en 2021 y que se ha mantenido en 2022 como consecuencia de la reactivación económica y la creación de empleo. En concreto, el déficit del Estado en los cuatro primeros meses del año 2023 se ha reducido un 76,5%.
Asimismo, el Ministerio de Hacienda y Función Pública también ha publicado hoy en su web los datos de déficit consolidado de la Administración Central, Comunidades Autónomas y Seguridad Social del mes de marzo en términos de contabilidad nacional, que también se ha reducido un 51,1% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.
Hasta abril, el Estado ha registrado un déficit equivalente al 0,12% del PIB, frente al 0,53% existente en abril de 2022. De esta forma, el déficit se sitúa en 1.660 millones, lo que supone un descenso del 76,5% respecto a los 7.061 millones del mismo periodo del ejercicio anterior. Este resultado se debe a un incremento de los ingresos no financieros del 10,7%, frente al comportamiento de los gastos, que crecen a un ritmo del 3%.
Hasta abril, los empleos no financieros del Estado se han situado en 82.511 millones, cifra superior en un 3% a la registrada en los cuatro primeros meses de 2022.
La partida de mayor volumen son las transferencias entre administraciones públicas, con un peso del 60% sobre el total de empleos no financieros. En concreto, en los cuatro primeros meses del año ascienden a 49.505 millones, un 5,1% más que el año anterior, por la dotación adicional de 1.666 millones destinada a Comunidades Autónomas y Corporaciones Locales para compensar el saldo global negativo de la liquidación de 2020.
Por su parte, las Comunidades Autónomas han sido destinatarias de 30.352 millones. En concepto de entregas a cuenta del sistema de financiación se han transferido a las de régimen común 26.832 millones, un 8,9% más que el año anterior.
A su vez, el Sistema de Seguridad Social ha recibido 6.437 millones, un 5,3% más que en 2022. Las Corporaciones Locales han recibido 8.929 millones, un 16,5% más que el año anterior.
La remuneración de asalariados crece un 3,2%. Esta rúbrica, que se sitúa en 6.225 millones, está afectada por la subida del 2,5% en las retribuciones del empleo público.
Los consumos intermedios han ascendido a 1.987 millones, un 14,9% más que en el mismo periodo de 2022. Por su parte, los intereses devengados aumentan un 0,5% hasta situarse en 7.946 millones, mientras que las prestaciones sociales distintas de las transferencias sociales aumentan un 12%, cifra que incorpora una revalorización de las pensiones contributivas de Clases Pasivas del 8,5% para el ejercicio 2023. Los perceptores de pensiones no contributivas mantienen durante todo el año 2023 la subida del 15% en sus prestaciones, que ya se les venía aplicando desde julio de 2022.
El gasto en subvenciones a la producción y a los productos registra un incremento del 24%, incluyendo en este ejercicio diversas ayudas al transporte, así como la financiación de la TUR (tarifa de último recurso) en el gas natural, entre otros.
Por su parte, la cooperación internacional corriente totaliza 648 millones, lo que supone un aumento del 23%, incluyendo 57 millones de aportación al FED y 224 millones de vacunas donadas a terceros países, mientras que la aportación a la UE por Recursos propios basados en el IVA y la RNB se sitúa 3.290 millones.
Por último, destaca la formación bruta de capital fijo, que se sitúa en 1.795 millones, mientras que las ayudas a la inversión y las otras transferencias de capital han ascendido en conjunto a 832 millones, lo que supone un incremento del 7,4% respecto a 2022, de los que 125 millones se destinan a la financiación de programas espaciales en el CDTI, un 20,2% más que en 2022