Así consta en la Central de Balances de 2014 que este martes ha presentado en rueda de prensa el director general de Economía y Estadística del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, y en la que se constata un resultado final para el conjunto de empresas no financieras del 159% el año pasado.
En lo que concierne únicamente a las pymes, el documento, consultado por Europa Press, señala que la reducción del 6,8% de los gastos financieros –gracias al desapalancamiento y a la reducción del coste de financiación– y la recuperación de los beneficios operativos permitió que las pymes españolas incrementaran su resultado ordinario neto un 65,9%.
Un porcentaje que supera el ascenso del año previo, que se situó en el 39,9%. Si se tiene en cuenta que el conjunto de las grandes, medianas y pequeñas empresas no financieras a lo largo de 2014 tuvieron un resultado ordinario un 19,7% superior al de un año antes, se concluye que las pymes experimentaron una evolución mejor que las grandes sociedades.
VALOR AÑADIDO.
De hecho, el valor añadido bruto de las pymes creció por primera vez desde el inicio de la crisis en 2007. En concreto, se incrementó un 5,4%, muy lejos de la caída del 1,8% sufrida un año antes y también muy por encima del 1,5% de aumento experimentado por las grandes empresas no financieras.
Según el Banco de España, esta «mejoría» de las pymes fue «generalizada» en todos los sectores, con la excepción de las inmobiliarias (-0,4%, más «moderado» que el -4,9% de un año antes) y la energía eléctrica, que fue el único con una trayectoria «negativa y más desfavorable» que en 2013.
MÁS EMPLEO.
Por otra parte, los gastos de personal de las pymes no financieras crecieron un 2,8% el pasado ejercicio cuando en 2013 habían caído un 2,2%. Y ello a pesar de que los salarios medios se mantuvieron prácticamente iguales, con una ligera caída del 0,1%.
Así, este »salto» se deriva, dice el supervisor, de la recuperación de la contratación, ya que se generaron un 2,9% más de puestos de trabajo, muchos más que entre las grandes sociedades (+0,6%) y «rompiendo la tendencia de destrucción continuada de empleo» que se mantenía desde 2009 y hasta 2013, cuando cayó un 1,5%.
A lo largo de 2014 el empleo temporal en las pymes no financieras se elevó hasta un 9%, con «más intensidad» que el fijo, que también creció, un 1,4%. Esta evolución se constató en «prácticamente todos los sectores», destacando la industria manufacturera (+3,4%) y el comercio (+,2,5%).
La Central de Balances del Banco de España incluye un análisis sobre la evolución de la actividad y los resultados de casi 243.000 empresas. De ellas, unas 232.000 son pymes, es decir, sociedades que no superan los 250 empleados, los 50 millones de activos ni los 43 millones de cifra de negocio.