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La anatomía patológica se encarga de evaluar muestras biológicas para identificar enfermedades, el profesional titulado en esta área puede ejercer tanto en laboratorios, instituciones forenses y clínicas
La rama sanitaria es una de las que más empleo genera. Además, en este caso el alumnado que se decante por estudiar una formación profesional de este campo abre sus vías laborales. Se puede decir que no solo al sector privado, como pueden ser laboratorios, farmacéuticas, industria alimentaria o clínicas especializadas en diferentes ámbitos de la salud, sino también a optar a plazas públicas.
Igualmente, el sector sanitario está en continuo crecimiento y evolución, razón de más para pensar que cualquier modalidad de estudio de ese ámbito tiene un alto nivel de empleabilidad. A todo eso, habría que sumar la elección de un buen centro que, además de una formación enfocada a la práctica y las destrezas de la actividad en sí, también ofrezca una buena forma de hacerse con una agenda de contactos.
Pero, ¿qué grado de Formación Profesional es ahora uno de los más demandados? Para contestar esa pregunta se va a poner el ejemplo de una modalidad que, actualmente, está en auge, se trata del Grado Superior Anatomia Patologica. Para hacer una exposición rápida de lo que consiste esta formación decir que es una rama especializada de la medicina encargada de analizar y determinar enfermedades utilizando la observación microscópica tanto de células como de tejidos.
En resumen, la anatomía patológica experimenta un protagonismo especial a la hora de detectar enfermedades. Además, contribuye a determinar los tratamientos más acordes utilizando, siempre, el análisis de cada muestra biológica analizada. Son esas las principales causas por las que los técnicos superiores de anatomía patológica y citodiagnóstico suelen emplearse en puestos relacionados con los laboratorios médicos y científicos, en instituciones forenses y, por supuesto, en todo tipo de clínicas especializadas.
A continuación, se van a exponer qué módulos componen cada curso, al tiempo que se recomendará uno de los centros formativos más prestigiosos para sacarse la titulación con la máxima referencia, a la par que aumente la empleabilidad del alumnado una vez se egrese del centro.
MEDAC: un centro ideal para cursar anatomía patológica
En primer lugar, decir que el técnico superior en anatomía patológica y citodiagnóstico consigue una titulación reglada y homologada, por tanto, tiene una absoluta validez tanto en el mundo académico como en el ámbito laboral. Eso, ¿qué permite?, pues una vez se hayan concluido los estudios de la FP superior de Anatomía Patológica existe una gran posibilidad de contratación y un acceso al mercado laboral relativamente sencillo. A eso, también contribuye el centro en el que se haya formalizado la formación, ya que su red de contactos y convenios de colaboración mejorarán, altamente, esa inserción laboral.
Es por todo lo anterior que la FP está orientada a la práctica, de ahí deriva el hecho de que cuando se concluye la parte teórica el alumno tiene la oportunidad de realizar prácticas muy exitosas en centros de investigación biomédica. Tener esa oportunidad abre puertas a trabajar en proyectos reales con fines sociales definidos por equipos altamente profesionales.
Un centro con un equipo docente eficiente y profesional
Ahora, se va a centrar más la atención en la metodología y la estructura en la que el centro MEDAC tiene planteado el Grado Superior de Anatomía Patológica. Concretamente, las sesiones formativas son presenciales al cien por cien. Es una manera de que los alumnos puedan interactuar mejor entre ellos, retroalimentarse de conocimiento y utilizar unas instalaciones de vanguardia junto a un equipo docente de primer nivel.
A todo lo anterior decir que la metodología aplicada es, en esencia, práctica y, para ello, se utilizan equipos y materiales de última generación con el deseo de que se apliquen de forma efectiva todos los conceptos teóricos. Tal formación se divide en dos cursos, con un total de 2.000 horas. Cada uno de los módulos, seis en el primer curso y siete en el segundo, tiene sus prácticas correspondientes.
En definitiva, para los alumnos, especialmente los que acaban bachillerato, matricularse en MEDAC en la FP superior de Anatomía Patológica y Citodiagnóstico supone un enorme trampolín laboral o para iniciar formaciones superiores futuras con una base sólida.