La Comisión Europea ha comunicado este miércoles que aprueba el borrador presupuestario español para 2021, pero advierte sobre la deuda, los desequilibrios tras la pandemia y el riesgo de la estabilidad fiscal.
Así, Bruselas considera que los PGE 2021 se ajustan a las recomendaciones de la Unión Europea. «Los dictámenes tienen en cuenta la actual crisis sanitaria, el alto nivel de incertidumbre y la grave recesión económica resultante del brote de la COVID-19», han explicado.
Aún así, han querido advertir de que «los desafíos para la economía real y el sector financiero han aumentado», no solo para España, sino para todos los socios comunitarios.
La deuda española alcanza este año el 120% del PIB y Bruselas se ha mostrado menos optimista con los ingresos que el Gobierno, por lo que ha solicitado a España preservar la sostenibilidad fiscal a medio plazo. Esta recomendación también va dirigida a otros países con una deuda elevada como es el caso de Francia, Italia, Portugal y Grecia.
Por último, la Comisión «invita a España a revisar periódicamente el uso, la eficacia y la adecuación de las medidas de apoyo y estar preparada para adaptarlas, según sea necesario, a las circunstancias cambiantes».