No se preocupen porque las bolas del sorteo sean frías o calientes, la temperatura subirá desde el momento que se conozcan los emparejamientos de las semifinales de la Champions League. A la emoción exhacerbada que produce un enfrentamiento de este nivel entre los que han demostrado ser los cuatro mejores equipo de Europa, se une la rivalidad que hay entre entrenadores y aficiones de todos los equipos.
Real Madrid, Atlético, Bayern de Múnich y Chelsea, toque el enfrentamiento que toque, habrá morbo. Entonces, las palabras más repetidas serán «venganza», «derbi» «desafío», «duelo» o «revancha». Figo, embajador de la final de Lisboa, volverá a repartir suerte e infortunios en grandes cantidades.
El Atlético se presenta como el invitado de honor en estas instancias de la competición, pero la confianza con la que llegan les convierte en merecidos y respetados aspirantes. Además, cuentan con las historia a favor para levantar el título. Los otros tres equipos están mucho más acostumbrados a colarse en las semifinale.
Será la cuarta semifinal consecutiva para el Real Madrid, que perdió las tres anteriores ante Barcelona, Bayern y Borussia; la cuarta en cinco años para el »ogro» alemán y actual campeón de Europa el Bayern de Múnich; mientras que el Chelsea afronta una nueva semifinal tras proclamarse campeón hace dos años y levantar la Europa League en la pasada campaña.
Mourinho disfrutará allá donde vaya
Lo dijo de su boca ante la pregunta de un posible enfrentamiento contra el Real Madrid, pero también lo hará ante el Bayern de Guardiola o el Atlético. El técnico portugués dejó al madridismo dividido y cada vez que Ancelotti cae derrotado, se recuerda a »The Special One» en la capital de España. Hombres como Casillas, Cristiano o Pepe podrán eliminar a un técnico con el que no se hablaban cuando compartían vestuario, mientras que Xabi Alonso, Arbeloa o Diego López vivirán un emocionante reencuentro con un entrenador que conoce a la perfección todas las virtudes y los defectos de los jugadores blancos y que se encargará de alimentar la polemica desde Londres en la previa del partido.
Si se da un Bayern – Chelsea, habrá duelo entre los dos entrenadores mejor pagados del mundo y se evocarán los encontronazos y cruces de declaraciones del pasado entre Barcelona y Madrid con Pep Guardiola y Mourinho en los banquillos. Ambos se midieron en la Supercoopa de Europa en el pasado verano con victoria bávara en la tanda de penaltis, por lo que el portugués ya espera revancha.
También tendría su gracia que Mourinho regresara al Calderón, uno de los estadios donde más se le ha atacado en los derbis entre Atlético y Real Madrid en las últimas temporadas. Además, los rojiblancos fueron el último equipo que le arrebató un título a los blancos, en la final de la pasada Copa del Rey.
¿Guardiola al Bernabéu? o ¿dos derbis dramáticos?
Si hay un equipo que el Real Madrid no quiere en el sorteo de semifinales es el Bayern de Múnich. Los alemanes tienen la vítola de favoritos en la competición por su enorme plantilla y por tener al mejor entrenador de los últimos años. Pep Guardiola conoce a la prefección a los jugadores de Ancelotti.
Cuando el catalán entrenó al Barcelona se convirtió en su gran bestia negra, ganando nueve partidos al Madrid, con cuatro empates y solo dos victorias blancas, una de ellas en la final de la Copa del Rey 2010.
En el entorno del Real Madrid han »elegido» al Atlético como su rival preferido para las semifinales. A pesar de que saben que serían dos derbis extenuantes, tienen la confianza de que se le sabe jugar y ganar, como demostraron en las semifinales de la Copa del Rey, donde ganaron por 3-0 en la ida y 0-2 en la vuelta.
En el Atlético tampoco se amilanan y ya no llegan a estos partidos con la ansiedad de sacar un buen resultado. La victoria en la final de Copa cambió el rumbo de la historia, después lo refrendaron con una victoria por 0-1 en la Liga y estuvieron cerca de repetir victoria en el Calderón (2-2).Sería el quinto y sexto enfrentamiento entre ambos equipos en lo que va de temporada y esta vez sí dejaría bien claro quien manda en la capital.
El Atlético merece una revancha 40 años después
El club rojiblanco ha llegado tres veces a las semifinales de la Champions. La primera vez fue en la temporada 1958-59, cuando cayó contra el Madrid. La segunda ocasión fue en la Copa de Europa de 1970-71, le tocó el Ajax y cayó eliminado. La tercera fue mucho más dramática.
Es la más recordada, porque el Atlético llegó a su única final de la historia y terminó perdiendo dolorosamente ante el Bayern de Múnich. Fue en la temporada 1973-74. Los rojiblancos se adelantaron con un gol de falta de Luis Aragonés, pero empató a pocos minutos del final empató Schwarzenbeck. Entonces no había prórroga y se tuvo que jugar un desempate. El atlético, plagado de bajas, sucumbió por 4-0.
Ahora los »guerreros» del Simeone podrían tener la opción de honrar la memoria y sacar esa espina clavada en el corazón de todos los atléticos desde hace 40 años en un duelo espectacular. El favorito contra un equipo invicto y con Courtois como portero menos goleado de la competición.
Que las bolas repartan suerte en el bombo de los morbos, especialmente para los equipos españoles. Aunque a estas alturas cualquier rival puede ganar un partido, lo que los protagonistas ya saben es que todos los caminos conducen a Lisboa.