El seleccionador español, Luis Milla, se ha mostrado optimista a pesar de la derrota en el debut olímpico, nada más terminar el partido. «Hasta el gol de Japón, el equipo estaba bien, y hemos llegado con cierta facilidad a su portería, pero a partir de la acción a balón parado y la expulsión de Iñigo, con un jugador menos, y con su velocidad, y que nos hemos expuesto porque íbamos por el partido”, ha asegurado.
Ha animado a sus jugadores, no hay tiempo para el victimismo y sí para levantarse e intentar dar el nivel exigido en una cita como la de Londres. “Hay que ser positivos, que quedan dos partidos que son dos finales, que tenemos margen de mejora, y que hay que mejorar. En la caseta he sido positivo porque quedan dos partidos para clasificarnos», insistía Milla.
«Yo he intentado ser positivo en el vestuario, porque pensamos que tenemos dos oportunidades más, y este equipo tiene crédito. Tenemos un partido en tres días en el que hay que mejorar cosas, no tenemos tiempo para trabajar y tiene que ser mucho trabajo mental, de concentración, porque a este nivel, los pequeños detalles te marcan, y nos ha marcado la acción a balón parado. Tenemos que ser más fuertes y más consistentes», ha dicho el deleccionador.
Respecto al partido y la derrota ante Japón, Milla lo tiene claro: «Hay dos acciones que marcan el partido, la del gol y la expulsión. Nosotros vamos al ataque, tenemos una filosofia, y ellos tienen mucha velocidad y se han aprovechado de eso. En esa situación, tenemos en cuenta que hemos buscado el empate, sabíamos que íbamos a correr riesgos, porque son muy rápidos».