Villarreal, Espanyol y Athletic de Bilbao se unieron al Barcelona en las semifinales de la Copa del Rey, que se disputarán el 11 y 12 de febrero y el 4 y 5 de marzo. El Submarino amarillo, que alcanza esta instancia del torneo por primera vez en sus 91 años de historia, se efrentará al Barcelona, mientras que Espanyol y Athletic se jugarán la otra plaza en la final.
Esta vez no apareció Palop ni Mbia (1-0)
Aunque le dio vida el postrero gol de Bacca en el partido de ida, encontró poco a lo que agarrarse el Sevilla en el Sánchez Pizjuán. Solo un golazo de Diogo en el 88 devolvió la esperanza a un equipo que casi se había resignado ante el eficiente frontón espanyolista. No sufrió un Espanyol bien plantado que cerró casi todas las compuertas a un rival al que le faltó claridad en todo momento. Pese a que hombres como Deulofeu o Denis lo intentaron en los costados y los balones al área fueron muchos, apenas facturó peligro el equipo de Emery. Esta vez no hubo Palop ni Mbia.
El Villarreal hace historia
El conjunto de Castellón repitió el resultado de la ida y venció 0-1 a un Getafe que ni siquiera pareció creer en la remontada. Desde la alineación, con varios no habituales, ya se intuyó que Quique Sánchez Flores tenía pocas esperanzas en un torneo que después deparaba un enfrentamiento con el Barcelona.
Aduriz hace la diferencia
Un tanto del delantero vasco en 180 minutos fue suficiente para que el Athletic juegue su tercera semifinal en seis años. Hizo más el conjunto de Valverde en la primera mitad, en la que Ochoa aplazó el primer gol, y lo hizo Aduriz recién estrenada la segunda parte tras una buena jugada colectiva. Empató el Málaga casi en la jugada siguiente gracias a un gran cabezazo de Javi Guerra, pero el línea lo anuló por un fuera de juego posicional de otro hombre. Más allá de esta opción, no pudo el equipo de Gracia encontrar el gol que les hubiera hecho avanzar después del 0-0 de la ida.