¿Fagocitará la extrema derecha a la derecha en las elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo? ¿Se empoderará el «feminismo facha», del que habla Leo Bassi, como ha ocurrido en Italia o Francia?
Para ayudarnos a pensar en todo ello, Leo Bassi vuelve al Teatro del Barrio, del 17 al 25 de mayo, con una versión revisitada de su Yo, Mussolini, una obra provocadora y divertida pensada para generar optimismo y dar al público ganas de resistir, con inteligencia, frente a la intolerancia. Además, este 28 de diciembre, la Iglesia Patólica que ha impulsado este cómico cumplirá diez años. No es casualidad que la abriera el Día de los Inocentes.
Mezclando el chiste y la provocación con una reflexión profunda sobre la manipulación política, Bassi resucita al Duce ahora que el fascismo también parece hacerlo en toda Europa. Así, Bassi se vuelve a posicionar frente a la extrema derecha con un espectáculo provocador y divertido nacido del auge en todo el mundo de la vieja ideología autoritaria y totalitaria. Un título que se estrenó la pasada temporada y defiende una vida más solidaria y humanista, y que recuerda que el fascismo crece por el miedo que genera, y el mejor antídoto contra ese miedo es el sentido del humor.
En esta nueva versión de la obra, Bassi incorpora extractos a propósito de la victoria electoral de Giorgia Meloni, y su «feminismo facha». ¿En qué se parecen las ideas de Mussolini o Hitler a las de Salvini, Farage, Abascal O Meloni? ¿Son estos segundos nombre herederos de los primeros?
Sobre la Iglesia Patólica
Desde su inauguración el 28 de diciembre del 2012 en Madrid, este lugar de culto llamado El Paticano de Lavapiés, dedicado a la adoración de un pato de goma amarillo «redentor», celebra regularmente misas y acontecimientos como bodas y bautizos, con su particular liturgia.
Lo más singular es que lo que empezó como una travesura original y divertida se ha convierte en algo que transciende la sátira, poniendo en evidencia las contradicciones siempre más grandes entre la narrativa oficial de nuestra sociedad y los valores que la gente vive.
Cada domingo en sus Misas Patólicas, el gran bufón que es Leo Bassi, provoca carcajadas y aplausos de consensos con preguntas y reflexiones tan básicas como: s
Si la ciencia y la tecnologia es tan importante por la Marca España, ¿cómo es posible que su gobierno preste juramento sobre un libro donde las serpientes hablan? ¿Cómo puede cuando también este libro se considera la sabiduría como fuente de todos nuestros pecados? La voluntad que tiene el público de reír estas cosas demuestra un déficit de legitimidad de las instituciones religiosas. Y ahí está la originalidad de esta propuesta.