Contundente y sin pelos en la lengua, César López admite haber buscado «una estética y un sonido más clásicos» para este segundo trabajo de estudio, consciente de que «en España gusta más ese tipo de rap».
«En este país la cosa va más despacio y la gente asimila las cosas más despacio», sentencia XCese, que señala que mientras que en Estados Unidos y Francia «el rap ha ido adquiriendo musicalidad», el rap español sigue anclado en la old school.
El rapero utiliza el soul, el reggae y el R&B en sus composiciones «para darle ese toque negro que tiene que tener el rap», pero llevándolos un paso más allá: el sonido electrónico que planea sobre todo el álbum lo aleja del tradicional bombo-caja del hip-hop.
«Para entender la música que hago hay algunos prejuicios o conceptos establecidos en el rap español que tienes que quitarte de la cabeza», sentencia el MC, que coquetea con el dubstep, el drum&bass o el house en trabajos al margen de este disco.
El individualismo, el egotrip, la competición y la lucha son el trasfondo lírico de »Parabellum», un disco del que XCese destaca el «optimismo» y la «motivación» que desprende: «Nos ha tocado un siglo difícil, pero tenemos la fe de que si seguimos luchando tarde o temprano recibiremos lo que creemos que merecemos».
Y como reza el título -»Parabellum», parte de la máxima »si quieres la paz, prepara la guerra»- para conseguir lo que uno quiere hay que pelear: «Para hacer el bien a veces primero hay que hacer el mal. Para conseguir la paz primero necesitas luchar y hacer la guerra, que en cierto modo es hacer el mal».
«Para cambiar todo esto vamos a tener que pelear, vamos a tener que llevarnos a más de uno por delante, tanto en la música como en la vida en general. Estamos en un momento en que es primordial que la gente entienda que regalando flores a los antidisturbios no se llega a ningún lado», sentencia el rapero.
«Los que están arriba y oprimen se ríen de esa actitud. Mientras sean flores y no cabinas rotas o cubos quemados o peleas con la Policía les va bien. Espero equivocarme y que todo se solucione de una forma pacífica, pero de momento no es así».
En esa reflexión -con claras alusiones al movimiento 15M- XCese cree que «el rap tiene algo que decir». Aunque considera que en España los raperos «no tienen mucha voz», mira a EE.UU. donde apoyan campañas de ayuda a las víctimas del Katrina o al candidato a la Presidencia y pronostica que en algún momento se llegará a esa situación.
«Cada vez más chavales escuchan rap y los raperos podremos jugar esa baza y hablarle al público de esos temas», asegura el MC, que aún así cree que al hip-hop «le falta abrir un poco la mente y no ser tan sectario».
«Puedes ser 100% rapero y estar en un concierto de flamenco o en una sala de electrónica y disfrutarlo. Así sale la variedad. El problema del rap es que la gente tiene la mente muy cerrada y piensan que son cosas contradictorias», alega.
«Hace falta más fusión, más estar con el resto de artistas y no discriminarnos a nosotros mismos pensando que somos menos músicos que otros artistas», explica XCese, que aboga por que los artistas del género trabajen para que el público se de cuenta de que no todo es blanco o negro, de que puede existir un gris, «porque si no el rap se puede hundir en la diferencia de pensamientos y al final ninguno comeremos de ello».