En declaraciones al 3/24 recogidas por Europa Press, Puig ha resaltado la dureza y la espiritualidad de los trabajos de Tàpies: «A través del arte, representaba los arañazos, las lágrimas y el sudor de la gente».
Puig ha lamentado la muerte de su amigo, con el que en plena posguerra fundo Dau al Set –junto a otros artistas–, y ha concluido: «Ahora ya solo quedo yo».