El monarca ha arrancado su discurso durante el acto de entrega de los Premios Nacionales de Cultura, que ha tenido lugar en la Catedral de Cuenca, con una mención expresa a la situación de Cataluña. Así, ha señalado que «ante quienes se sitúan fuera de la legalidad constitucional y estatuaria y fracturan la sociedad», él está «seguro de que los derechos que pertenecen a los españoles serán preservados y las libertades de todos los ciudadanos serán garantizadas y protegidas».
«La convivencia, en una democracia constitucional como la nuestra, solo es posible si las leyes que la regulan y organizan son atendidas y cumplidas por los ciudadanos y por las instituciones; si los derechos y libertades de los ciudadanos son tutelados y respetados por los poderes públicos», ha añadido.
El Rey ha ligado estas reflexiones a la definición de cultura, que es «la historia y el arte», y ha puntualizado que «para poder expresarse, la cultura necesita libertad», «libertad que costó mucho conseguir a los españoles». «Una aspiración alcanzada después de muchos sacrificios y esfuerzos, gracias al compromiso y la generosidad de todos. Un gran triunfo colectivo que es irrenunciable», ha manifestado Felipe VI.
Asimismo, ha insistido en que las libertades de «todos los ciudadanos serán garantizadas y protegidas». «Nuestra vida en común en libertad es el fundamento de nuestro progreso y pilar esencial de nuestra pertenencia a la Unión Europea».