El magistrado presidente del tribunal que enjuicia la pieza política del caso ERE, Juan Antonio Calle, ha ordenado que el forense de guardia acuda a la casa del exconsejero de Innovación Francisco Vallejo para examinarle tras emitir un informe indicando que puede asistir, contrario al de su médico.
La abogada de Vallejo, Encarnación Molino, había pedido la suspensión del juicio contra 22 ex altos cargos de la Junta ante la imposibilidad de su cliente -de baja con reposo médico en su domicilio- de asistir y considerar que su estado «débil» y «medicado» le impide suplir su asistencia con el visionado de las cintas del juicio, donde hoy estaba previsto el interrogatorio a la exconsejera Magdalena Álvarez.
El tribunal ha acordado, a petición de la Fiscalía, solicitar un informe al forense de guardia en los Juzgados y ha suspendido la sesión provisionalmente durante hora y media.
Tras la suspensión, el tribunal ha recibido el informe del forense elaborado tras examinar la documentación médica aportada por la abogada de Vallejo y ha estimado que el exconsejero está en condiciones de asistir al juicio «como espectador» y sin realizar «esfuerzo», tras haberse sometido a una intervención «por laparoscopia sin complicaciones» el pasado miércoles.
El forense estima que para declarar estará en condiciones tras diez días desde la operación de urgencias a la que fue sometido por un problema de vesícula.
Ante este informe, el tribunal ha acordado continuar con el juicio, si bien la abogada de Vallejo ha expresado su protesta por considerar que se somete a su cliente «a un trato de excesivo rigor».
El magistrado Juan Antonio Calle la ha cortado una vez formulada la protesta y la ha instado a llamar a su cliente y «si considera que su presencia es necesaria dígale que venga inmediatamente», ha dicho.
Tras un receso de unos minutos, las partes han vuelto a entrar en sala y la abogada de Vallejo ha señalado, tras haber hablado con él, que su cliente no está en condiciones de asistir y así lo determina su médico, ante lo que ha impugnado el informe del forense al haber dos opiniones médicas contradictorias.
El juez, visiblemente molesto, decir varias veces a la letrada que no admitía «más discusión» y que para el tribunal la opinión válida es la del forense, ha preguntado al resto de partes.
El fiscal ha estimado que Vallejo tiene que decidir si asiste o admite su ausencia durante su convalecencia y el PP-A se ha adherido, mientras Manos Limpias ha propuesto que al haber dos informes contradictorios el forense examine a Vallejo y emita un nuevo informe, propuesta a la que se han adherido varias defensas.
Al pronunciarse, varios abogados de otros acusados han alertado del riesgo de incurrir en un «vicio de nulidad» en caso de forzar la continuación del juicio y han señalado la «situación muy delicada» en la que se pone a la defensa de Vallejo, que procesalmente considera «absolutamente imprescindible y necesaria» la asistencia de su cliente, al que su médico le dice que no está en condiciones.
El tribunal ha hecho, en torno a las 13.00 horas, otro receso para deliberar sobre esta propuesta y ha acordado que el forense acuda al domicilio de Vallejo a examinarlo para que se ratifique en su informe o emita uno nuevo, si bien ha dicho a las partes que permanezcan en los Juzgados hasta que el forense emita el nuevo informe y en su caso decidir si suspende o continúa la sesión.