La fiscal a cargo del procedimiento por la salida a Bolsa de Bankia, Carmen Launa, cursó baja médica por enfermedad y el pasado 11 de enero suspendió el juicio oral. Anticorrupción informó al tribunal de que su plazo de recuperación «no debería ser superior a un mes» pero se trata de un lapso «en el que no es posible su reemplazo debido tanto a la indiscutible complejidad del procedimiento como a los limitados medios personales de la Fiscalía».
A no poder establecer una fecha concreta en la que reanudar las sesiones, Anticorrupción propuso al tribunal que se celebrase una sesión la semana del 4 al 8 de febrero «a los solos efectos de concluir el interrogatorio del señor Rato, prácticamente ultimado en lo que atiene al Ministerio Fiscal».
Ahora, la Sección rechaza esta alternativa porque entiende que «puede resultar inadecuada a los intereses de las otras partes, sobre todo de aquellos acusados no afectados por la responsabilización penal deducida por el Ministerio Público y respecto de los cuales, además, peticionó el sobreseimiento libre», es decir, 30 de los 34 procesados, sobre los que no ha presentado acusación.
Asimismo, el tribunal pide a las partes que en tres días «puedan ofrecer posibles soluciones tendentes a solventar la situación de paralización de la causa por tiempo incierto» sin que la aportación de la Fiscalía «palíe, en puridad de concepto» lo que define como un «indeseable escenario».