El primer ministro británico, David Cameron, ha confirmado la muerte de Chris McManus y LaMolinara Franco, dos trabajadores de la construcción secuestrados en mayo en Nigeria, a manos de los terroristas que los mantenían cautivos. Cameron ha asegurado que los dos hombres fueron asesinados antes de que pudieran ser rescatados, después de autorizar la misión conjunta con las fuerzas de seguridad nigerianas para salvarlos.
Los captores han cumplido así la amenaza que habían lanzado en un video advirtiendo que los mataría. McManus y Franco fueron secuestrados por hombres armados el año pasado en su apartamento en Birnin-Kebbi, en el noroeste de Nigeria. El único que consiguió escapar fue un compañero alemán que escapó escalando una pared. Según informó la Policía nigeriana tras el secuestro, los hombres armados no se llevaron una importante cantidad de dinero que se encontraba en el apartamento.
Cameron había dado horas antes la orden de participar en el rescate porque que contaban con indicios fiables sobre su paradero. «Después de meses de no saber dónde se encontraban detenidos, recibimos información creíble acerca de su ubicación y se presentó una ventana de oportunidad para asegurar su liberación”, explica el primer ministro, ya que había señales para pensar “que sus vidas estaban en peligro inminente y creciente”.
De hecho, ha sido el primer ministro británico quien le ha transmitido la noticia a su homólogo italiano, Mario Monti. «Cameron ha expresado a Monti sus profundas condolencias por la víctima italiana, lamentando el dramático final de la iniciativa militar, decidida por las autoridades nigerianas y británicas con la convicción de que esta fuera la última oportunidad para salvar la vida de los rehenes«, reza el comunicado italiano.