Según ha indicado la Guardia Civil en un comunicado, la actuación se enmarca dentro del plan »Turismo Seguro», cuando la patrulla de agentes realizaba servicio en la zona indicada y observó que se acercaba a la costa una moto de agua con dos tripulantes.
Ante la sospecha levantada, los agentes se dirigieron a la playa, donde sorprendieron a los dos tripulantes descargando un fardo de hachís, de 30 kilos en total, por lo que se procedió a la detención de ambos, que resultaron estar indocumentados y ser de nacionalidad marroquí.