Este fin de semana ha sido muy bueno y los españoles han aprovechado los días de sol para hacer actividades que llevaban meses sin poder realizar. Salir a pasear, ir al campo o disfrutar de un día de playa, son algunos ejemplos que se han podido ver estos días.
Pero pocos se han dado cuenta de que el sol »quemaba» y no se han protegido como deberían. La dermatóloga del Hospital de la Zarzuela, Montse Fernández, explica que “no es que estos primeros rayos de sol que han venido con el buen tiempo sean peores sino que nos pillan menos preparados que más adentrada la primavera o el verano”.
La especialista destaca que es muy importante protegerse para evitar quemaduras en la piel. Las gorras o las gafas de sol son indispensables para evitar quemarnos pero también la ropa y “las cremas de al menos factor 30, además de evitar la exposición a las horas centrales del día”.
“No solo te puedes quemar si te expones demasiado al sol sin protección sino que además te pueden salir manchas y arrugas. La piel, tras varios meses de invierno, está más sensibles a los rayos del sol”, recuerda la dermatóloga.
«Si te quemas, crema hidratante y after sun»
Si ya te has quemado este primer fin de semana de sol, solo te queda cuidarte la piel. Lo más importante es que no vuelvas a exponer la piel afectada a los rayos. “Tras una quemadura solar la piel se inflama, se enrojece y se vuelve dolorosa al tacto. Se trata de un proceso que resuelve de forma espontanea en unos días”, explica Fernández.
La especialista recomienda aliviar la piel afectada con cremas hidratantes suaves que no contengan urea, láctico o salicílico que pueden producir escozor. También se pueden utilizar agentes calmantes como hidratantes de aloe vera o camomila. “Si la quemadura es más grave, que no suele ser lo normal, se utilizan cremas corticoides con o sin antibiótico”.