Según ha informado en un comunicado de prensa la Santa Sede, durante las conversaciones, «transcurridas en un clima de cordialidad», se constató la contribución «positiva» de la Iglesia Católica en la sociedad polaca y se habló también de la visita que el pontífice argentino efectuará a Cracovia el próximo año con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud.
«Sucesivamente se abordaron algunas cuestiones de interés mutuo, tales como la promoción de la familia, el apoyo a los grupos sociales más necesitados y la acogida de los migrantes», según se lee en el comunicado.