Guillermo Escolante, Presidente de la Asociación toledana de Vecinos de Palmorejos, asegura que lo conoce desde hace muchos años, desde que entró en política: «fue concejal desde muy pronto y no puedo decir nada malo de él. Viene de una familia de muchos hermanos y se ha ganado todo a pulso. Entró en política con Joaquín Sánchez Garrido y luego ha ido de la mano de José Bono».
Esta característica -la humildad de sus orígenes-, así como su capacidad de trabajo y su manera cercana de ser, le han servido para ganarse el respeto personal y político de mucha gente.
Quizás por ello, Escolante asegura que «si va a dar un paso, el que sea, contará con el respaldo de mucha gente; con Bono, Barreda y demás. Aunque yo creo que ese salto va a ser más a nivel regional que a nacional. Es un candidato libre, mucho más joven de los que se presentan, y ha sido de los pocos que se ha librado de la debacle que ha sufrido el PSOE en las pasadas elecciones».
A la hora de señalar su ideología, Escolante señala que «no está muy a la izquierda, pero no es de derechas. Sabe lo que quiere y puede dar la talla». Es decir, García-Page ocupa las posiciones más centristas dentro del PSOE.
Quienes conocen bien su posicionamiento ideológico y estatégico son sus principales adversarios políticos: el Partido Popular. Fuentes de esta formación recuerdan como «la última campaña electoral la ha basado toda en él mismo, y nada en su partido, el PSOE, ni siquiera en Barreda».
Dichas fuentes también coincide con Escolante a la hora de señalar su filiación política: «es un fiel hijo de Bono: es populista, no le importa hacer lo que sea con tal de salir en la foto». También reconoce que «no hay mal rollo entre él y los concejales. Es afable, en esto también es el delfín de Bono».
Los populares intuyen que García-Page ahora parece que quiere dar el salto a la política regional, «porque ahora mismo el PSOE de Castilla la Mancha no existe. Barreda está desaparecido».
Una de las personas que mejor conocen su trayectoria política es Javier Rueda, quien durante muchos años ha sido el jefe de Gabinete de Emiliano García-Page. «Con 18 años fue el concejal más joven de España, y con 23, de la mano de Bono, es el consejero autonómico de España», recuerda Pueda.
Por tanto, parece claro que la trayectoria de García-Page está muy unida a Bono y Barreda, aunque algunas veces, en el pasado, parece que entre Barreda y él ha habido roces por ver quien sería el sucesor de Bono.
Asímismo, Rueda dice que «la idea de presentarse a la alcaldía de Toledo fue idea suya. Mucha gente se lo desaconsejó porque Toledo es un bastión muy conservador. Pero la gente le ha avalado y el pasado año revalidó el título, y puso en valor su perfil político frente al del PSOE nacional».
Un perfil que, a tenor de los visto, se caracteriza por el sentido común, por «trabajar cuerpo a cuerpo con los ciudadanos, rechazando sectarismos y fundamentalismos. En contacto con la realidad. Y abanderando políticas para todo el mundo, para los empresarios y para los trabajadores, con un único objetivo: crear empleo» recalca Rueda.
Puestos a recordar,su ex jefe de Gabinete trae a la memoria el día en que el político manchego visitó al Rey en la Zarzuela. Don Juan Carlos le dijo: «Tenemos una cosa en común: eres el consejero más joven de España y y yo soy el rey más joven de España».
En cuento a su entorno familiar, Rueda señala que Emiliano tiene un hermano gemelo con el que guarda una excelente relación, pero que muchas veces, medio en broma, «huye» para que no le vean, porque cada vez que sale a la calle la gente lo confunde con el alcalde y se le abalanzan 200.000 personas para pedirle algo.
Por lo demás, García-Page vive en su piso de toda la vida en una urbanización de Toledo y su único hobby conocido es la política. «Aunque para él», puntualiza Rueda, «la política, más que un trabajo, es una forma de vida. A nivel personal también vive la política muy de cerca porque a su mujer le gusta y es su mejor consejera y apoyo». Aparte de la política, lo que más le gusta es viajar.
En cuanto a sus aspiraciones políticas, consisten en «ser consecuente con el respaldo que ha recibido para su actual cargo, que es el de alcalde de Toledo. Ahora, quiere contribuir al congreso federal del PSOE participando y apoyando en el ideario del partido. Pero tal y como está el PSOE hay incertidumbre, porque no se había medido la dimensión que iban a adquirir su intervención».
Ante el debate ideológico que se está suscitando dentro del partido, Rueda recalca de nuevo que «su ideología es la del sentido común: es socialista pero también es católico practicante, aunque no va por la calle de rodillas ni dándose golpes en el pecho. Y ha hecho política de 360 grados: para los empresarios, para los padres, para las madres, para los trabajadores…»