La alta política en España sigue siendo cosa de hombres. El recién estrenado Portal de la Transparencia permite conocer, entre otras informaciones, quiénes son los altos cargos que componen el Gobierno de España, su formación y experiencia profesional y sus salarios, lo que más ha llamado la atención de los medios de comunicación. Pero además posibilita crear estadísticas con los datos proporcionados. El directorio de profesionales de más alta responsabilidad de la Presidencia y los diferentes ministerios muestra cómo aún sigue habiendo diferencias entre la cantidad de hombres y mujeres que ocupan cargos como el de Ministro, secretario de Estado o director general.
Esta situación incumple la Ley de Igualdad de 2007, que establece un equilibrio del 60% – 40% entre ambos sexos.
La Presidencia y los 13 ministerios que componen el Gobierno se reparten un total de 449 altos cargos, de los cuales sólo 102 son mujeres. Es decir, sólo el 22,7% de los puestos de máxima responsabilidad del Ejecutivo recaen sobre profesionales femeninos. El 77,3% lo ocupan hombres.
Defensa es el ministerio menos paritario y Sanidad el más igualitario
La disparidad entre sexos llega a cifras aún menos equilibradas en algunos ministerios. Defensa es el menos paritario. La cartera que ostenta Pedro Morenés tiene entre sus altos empleados a 46 hombres y 3 mujeres, es decir sólo el 6,5% del alto funcionariado de Defensa está ocupado por mujeres.
Exteriores es el otro ministerio que menos mujeres cuenta como altos cargo. Es la cartera que a más altos funcionarios emplea, un total de 154. Sólo 19 son mujeres, el 12,3%.
En el lado opuesto de la tabla sólo hay tres ministerios que cumplen con la proporcionalidad de 60% – 40%. Exactamente éste es el porcentaje de los cargos más importantes que trabajan para Justicia. El ministerio de la Presidencia, dirigido por Soraya Sáenz de Santamaría cuenta con siete mujeres y 10 hombres, lo que supone un 41,2%. Aprobado por los pelos.
La cartera más paritaria no podía ser otra que la de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. El recién estrenado ministro Alfonso Alonso ha tomado su cargo junto a ocho mujeres, un 47% del total de altos empleados.
El resto de carteras: Hacienda, Interior, Fomento, Educación, Empleo, Industria, Agricultura, Economía y la propia Presidencia del Gobierno siguen sin ser paritarias.
Cuesta cumplir la Ley de Igualdad
“Es el propio Gobierno el que incumple con la legislación en el reparto de ministerios”, sentencian en el Departamento de Estudios de Postgrado de Género en la Universidad Complutense de Madrid. Se refieren al número de hombres que ostentan la titularidad de los 13 ministerios. Sólo hay cuatro ministras en el Gobierno: Soraya Sáenz de Santamaría (vicepresidenta y responsable de Presidencia); Fátima Báñez (Empleo y Seguridad Social); Ana Pastor (Fomento) e Isabel García-Tejerina (Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente).
«No es de extrañar que hagan lo mismo para el resto de altos cargos». La Ley Orgánica 3/2007 establece en su artículo 52 que “El Gobierno atenderá al principio de presencia equilibrada de mujeres y hombres en el nombramiento de las personas titulares de los órganos directivos de la Administración General del Estado y de los organismos públicos vinculados o dependientes de ella”.
Ése es el criterio generalizado para cualquier sector tanto de la esfera pública como de la privada y para cualquier tipo de empleo. La Ley de Igualdad sólo hace excepciones en aquellos trabajos que por características físicas o por un objetivo concreto se necesite mayor número de hombres o de mujeres.
A la hora de designar a los altos cargos, el Gobierno hace caso omiso del artículo 54 de la Ley de Igualdad: “La Administración General del Estado y los organismos públicos vinculados o dependientes de ella designarán a sus representantes (…) de acuerdo con el principio de presencia equilibrada de mujeres y hombres, salvo por razones fundadas y objetivas, debidamente motivadas”.
La Ley fue uno de los compromisos electorales de José Luis Rodríguez Zapatero en su campaña para las elecciones generales de 2004. Fue aprobada tres años después, pero el presidente socialista quiso realizar algunos gestos que significaran un cambio de actitud en la proporción entre hombres y mujeres en la Dirección General del Estado. El primer Ejecutivo de Zapatero fue el primer Gobierno paritario de la historia de España, formado por ocho ministros y ocho ministras además del presidente. La regla se cumplió a rajatabla hasta 2010, cuando la galopante crisis obligó a una nueva reforma en los titulares de las carteras, quedando nueve hombres y siete mujeres en el último Gobierno del PSOE.
Pero sólo fueron gestos, las exigencias de la Ley aprobada en 2007 quedaron diluidas cuando se descendía en la pirámide de altos cargos públicos. Fue difícil aplicarla, algunos dirigentes aseguraron que les estaban contando crear equipos paritarios debido a la falta de demandantes femeninas. De hecho, nunca se llegó a conseguir los porcentajes que el propio Gobierno se exigió, lo que provocó fuertes críticas de la oposición.
En 2008, sólo el 31,9% de los altos funcionarios del Gobierno correspondían a mujeres. La paridad sólo se cumplía en los responsables ministeriales. Sin embargo, en el asiento de las 221 Direcciones Generales sólo se sentaban 65 mujeres. En cuanto a las Secretarías de Estado, únicamente 10 de las 32 recaían sobre el sexo femenino.
Más paridad en el Gobierno que en el IBEX-35
Pese a la falta de paridad del sector público, la situación es aún peor en el ámbito privado. Las mujeres que tienen presencia en la alta dirección de las grandes empresas privadas asciende a un porcentaje del 16’8% de mujeres. Son datos extraídos del estudio ‘Mujeres en la alta dirección de las empresas en España‘ que está realizando el Centro de Buen Gobierno Corporativo del Instituto de Empresa a instancias de la Mutua Madrileña, publicado el pasado mes de noviembre.
La estadística se refiere al año 2013 y tiene una muestra de 147 compañías consideradas como las más importantes del país. Se encuentran las 35 del IBEX, el resto de las sociedades cotizadas en el mercado continuo, que son 70, y otras 42 compañías más que aunque no cotizan en la Bolsa, han sido incluidas en la investigación por su relevancia y su reputación.
Otra conclusión del estudio es que las empresas del Ibex tienen aún menos representación femenina en la alta dirección que el resto de las compañías de la muestra, ya que solo hay un 10% de mujeres en la dirección de las del parqué madrileño. En las sociedades del mercado continuo, el porcentaje de mujeres directivas es del 12 por ciento y en el grupo de no cotizadas hay un 18 por ciento de mujeres en la dirección.
La investigación se refiere a los cargos que ocupan las mujeres directivas en España. Solo un 13 por ciento de ellas están en los puestos considerados de primera categoría -presidencia, vicepresidencia, consejero delegado, director general y secretaría general-, mientras que el resto está en el segundo nivel de dirección, con especial tendencia a responsabilizarse de la gestión de recursos humanos o de áreas funcionales específicas.
Según datos del INE en 2012, la presidencia de las empresas del IBEX recaía en mujeres sólo en el 2,9% de las ocasiones, la vicepresidencia en el 7% de los casos, mientras que el 15% de los consejeros eran del sexo femenino.
Ambos porcentajes, tanto los de la alta dirección del Gobierno, como los puestos de responsabilidad en la empresa privada, están lejos de la representación femenina en el mercado laboral español, que es del 45 por ciento y demuestra la casi plena incorporación de las mujeres en el mercado laboral. También está por debajo del porcentaje de tituladas universitarias, donde llega al 60 por ciento.