Soler ha explicado en rueda de prensa que el Parlament está cerrado porque «el nacionalismo fractura y divide», y ha matizado que Cs es prudente con lo que publica el CEO –que determina que ERC ganaría las elecciones al Parlament con un 24% de los votos y lograría entre 35-37 escaños–, porque tampoco pronosticaba buenos resultados para su formación y, sin embargo, fue el partido más votado.
Soler ha lamentado que el Parlament «esté cerrado por culpa del separatismo y de la complicidad del PSC», y la ausencia del vicepresidente de Economía, Pere Aragonès, en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) que, según el diputado, ejemplifica la crisis interna entre los independentistas.
Asimismo, ha criticado la suspensión del pleno de este jueves porque, según cree, impidió abordar un debate monográfico sobre temas sociales y económicos y sobre la fractura social, y ha considerado que «el nacionalismo es esto: recibir una llamada de Puigdemont ordenando cerrar el Parlament, generando división y silenciando a la oposición».
Sobre la decisión de retirar la euroórden a Puigdemont dictada por el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena, Soler ha reivindicado que Cs siempre respeta las decisiones judiciales pero que su formación quiere «reformas consensuadas con Europa».
Ha añadido que este jueves en el Congreso Cs presentó una reforma no de ley que insta al Gobierno de Pedro Sánchez a ampliar los delitos que no requieren el control de doble tipificación para los estados miembros e incluir, como equivalentes a delitos contra los estados en diferentes jurisdicciones nacionales, los delitos de sedición, rebelión, traición y alta traición.