Ambos se han reencontrado a través de videoconferencia y han mantenido una conversación de media hora después de 553 días de no haber podido tener contacto: Puigdemont lo ha hecho desde Waterloo (Bélgica), y Sànchez desde la prisión de Soto del Real.
Tanto Puigdemont como Sànchez han coincidido en que el voto que más puede ayudarles a salir de la prisión y a poder volver a casa es el del espíritu que hizo posible el 1-O: «El espíritu del 1-O es el que nos sacará de estas situaciones».
(HABRÁ AMPLIACIÓN)