«Nosotros tenemos la absoluta confianza y conciencia de que estas leyes tienen toda la calidad democrática y toda la garantía jurídica, pero quien no está de acuerdo con ese enfoque tiene la posibilidad de impugnarlas», ha explicado Catalá en declaraciones a los medios de comunicación en la sede de su departamento.
Para el ministro, tanto la presentación de los recursos como su admisión a trámite por parte del Tribunal Constitucional para iniciar la «instrucción y análisis» son «una manifestación de reglas del juego democráticas».