La estrategia de perfil bajo llevada al terreno de la prensa es obra y empeño de Carmen Martínez Castro (Caracas, 1961). Desde que Mariano Rajoy la eligió en noviembre de 2006 como jefa de prensa en Génova, ha ido construyéndose alrededor de él un muro informativo que deja pocos resquicios. Esta barrera le ha evitado golpes mayores en el partido y le ha permitido aguantar en la pesada carrera por La Moncloa. Ahora mantiene al presidente alejado de los focos mientras se recrudece la batalla de los recortes y ahora, la del PP.
La hoja de ruta consiste en dejar que hablen los ministros y que el presidente no pise terrenos pantanosos, no arriesgue para no cometer errores, tampoco improvisar y dejar que se desgaten los demás. La contrapartida es la imagen hierática y fría, pero al mismo tiempo se imprime sosiego y seriedad.
A Martínez Castro se le achaca la ‘moda’ de ruedas de prensa sin preguntas, los escasos ‘briefing’ y las huidas de Rajoy, sobre todo si hay tormenta.
Martínez Castro, periodista de larga trayectoria con experiencia en medios punteros, como Antena 3, la Cadena Cope y Onda Cero, forma parte del círculo de mujeres de confianza del presidente: Ana Mato, Ana Pastor, Dolores de Cospedal y Soraya Sáenz de Santamaría.
Cuando Rajoy se fijó en su trabajo, dirigía el informativo de mediodía de Onda Cero. Perseverante, paciente, leal y con un profundo conocimiento del funcionamiento de los medios de comunicación. Son algunas cualidades que resalta el diario La Razón, de donde fue columnista.
Quizá esa fidelidad hacia lo que cree y el hecho de conocer la maquinaria informativa con detalle convencieron al entonces líder de la oposición para ficharla como jefa de prensa, que con el tiempo se convirtió en parachoques y persona de máxima confianza. Martínez Castro integra la guardia pretroriana que protege a Rajoy en público, con Jorge Moragas, a la cabeza.
De trato afable, la prensa tiene sensación, sin embargo, de chocarse contra un muro y de llevarse ciertas sorpresas, con notas de prensa inesperadas. Un caso ‘célebre’ fue el comunicado emitido una tarde de abril de 2012 que escondía en el tercer párrafo unos recortes de 10.000 millones de euros en Sanidad y Educación.
Martínez Castro es la coraza informativa y el dardo de críticas de los medios de comunicación, que reprochan el hermetismo de la Moncloa. Además de coordinar la política informativa del Gobierno, dirige los servicios de la Administración del Estado en el extranjero, donde se ha criticado que Rajoy decida sin debate. Por ejemplo, el diario Financial Times ha criticado en su editorial que el presidente prefiera gobernar por decreto, sin consensos y sin informar apropiadamente a los ciudadanos.