Sierra Leona anunció un confinamiento de tres días de unos 2,5 millones de habitantes en la región de la capital, Freetown, y en el norte del país para hacer frente a la epidemia de ébola.
El peor brote del virus se ha cobrado la vida de casi 3.700 personas en este empobrecido país de África, una de las tres naciones cuyas economías se han arruinado y cuyos sistemas de salud están saturados a causa de la epidemia.
«El confinamiento se prolongará entre el 27 y el 29 de marzo y será similar al de septiembre» pasado, que fue impuesto en todo el país, declaró a la prensa el jefe del Centro Nacional de Lucha contra el Ébola (NERC), Palo Conteh.
«El gobierno y sus socios esperan que los casos latentes que de momento no están siendo reportados o remarcados sean visibles», agregó.
Uno de cada cinco contagiados son niños
Los niños acaparan un 20% de los casos de contagio de ébola en los tres países más afectados por la epidemia (Guinea, Liberia y Sierra Leona), según un informe dado a conocer este martes por Unicef (Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia), que consideró imprescindible acabar con la enfermedad y trabajar para restablecer los servicios básicos con el fin de proteger a los niños y sus comunidades.
El ébola ha matado a más de 10.000 personas
El número de personas fallecidas debido a la enfermedad del virus del ébola en los tres países de África occidental más afectados por la epidemia (Liberia, Sierra Leona y Guinea) supera ya los 10.000, según los últimos datos recopilados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y dados a conocer este jueves.
La enfermedad ha matado a un total de 10.004 personas de 24.350 casos confirmados, probables o sospechosos en estos países. Esto supone que la tasa de letalidad del brote de ébola es del 41,1%.
El país más afectado continúa siendo Liberia, con 4.162 muertos de 9.343 casos, seguido de Sierra Leona (3.655 fallecidos y 11.677 infectados) y Guinea (2.187 difuntos y 3.330 contagiados).
Los datos de la OMS señalan que ha transcurrido poco más de un mes desde que el pasado 6 de febrero se rebasara la barrera de los 9.000 víctimas mortales por el ébola, y de dos meses desde que el 5 de enero se superaran los 8.000 fallecidos.